Cuando tiemblan los cimientos del edificio del poder
Los primeros cascotes que caen desde arriba
Lo hacen sobre la cabeza de los anarquistas
Cada vez que los poderosos tienen miedo
Tratan de zafarse de nosotros
Los de abajo
Ellos tienen el poder de administrar la violencia
Y la derrochan por doquier
Ellos tienen el poder de detentar el poder
Y lo ostentan por doquier
Ellos tienen la potestad de encerrarnos
Y no dudan en hacerlo
Nosotros no tenemos la Razón
Nosotros no tenemos la Verdad
Nosotros no tenemos nada
Sólo tenemos amor hacía el género humano
Sólo tenemos nuestros cuerpos
Y esos se pueden encerrar
Golpear
Matar
Pero también tenemos nuestras ideas
Y esas no caben tras los barrotes de ninguna
prisión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario